El Helicobacter pylori es una bacteria que se encuentra en el estómago, la cual se asocia a diversas enfermedades gastrointestinales, como pueden ser la gastritis crónica, las úlceras pépticas y el cáncer gástrico. Cuando se detecta la presencia de esta bacteria es importante establecer un tratamiento para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados. Es por ello que, si quieres conocer cuál es el tratamiento para el Helicobacter pylori, te invitamos a seguir leyendo.
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Tratamiento para Helicobacter pylori en adultos
De forma general, aquellas infecciones causadas por Helicobacter pylori se tratan con una combinación de, al menos, dos antibióticos distintos que se toman simultáneamente para evitar que la bacteria desarrolle resistencia a un antibiótico específico. Algunos de esos antibióticos pueden ser la amoxicilina y la claritromicina.
Además, el régimen de tratamiento también puede incluir medicamentos destinados a sanar el estómago, tales como:
- Subsalicilato de bismuto: conocido comúnmente como Pepto-Bismol, este medicamento protege la úlcera recubriéndola, lo que ayuda a protegerla del ácido estomacal.
- Inhibidores de la bomba de protones (IBP): estos fármacos reducen la producción de ácido en el estómago. Ejemplos incluyen esomeprazol (Nexium), omeprazol (Prilosec), lansoprazol (Prevacid) y pantoprazol (Protonix).
- Bloqueadores de la histamina (H-2): estos medicamentos inhiben la acción de la histamina, una sustancia que estimula la producción de ácido (además de dar una respuesta inmunológica en una reacción alérgica). Estos bloqueadores se utilizan en caso de que los inhibidores de la bomba de protones no sean una opción viable.
Unas cuatro semanas después de haber finalizado el tratamiento para esta bacteria, se recomienda realizar de nuevo las pruebas de detección. Si los resultados indican que la infección aún persiste, será necesario administrar un tratamiento adicional en el cual se incluya una nueva combinación de antibióticos.
Efectos secundarios de tratamiento para Helicobacter pylori
El tratamiento para Helicobacter pylori puede tener efectos secundarios, aunque no todos los pacientes los experimentan. Algunos de los más comunes incluyen:
- Náuseas y vómitos.
- Diarrea.
- Dolor abdominal o calambres.
- Alteraciones del gusto.
- Mareos.
- Dolor de cabeza.
- Reacciones alérgicas a los medicamentos.
- Infecciones por hongos debido al uso de antibióticos.
Además de estos, se podrían dar otros efectos adversos que pueden ser más graves, tales como:
- Sarpullido o urticaria.
- Descamación de la piel o ampollas.
- Dificultad para tragar o para respirar.
- Hinchazón de lengua, ojos, cara, piernas o brazos.
- Fiebre, dolor de garganta, escalofríos u otros síntomas de infección.
- Ronquera.
- Aumento del ritmo cardiaco, convulsiones.
- Diarrea muy acuosa o con sangre, que se da tras tomar la medicación o hasta 2 meses después.
- Orina oscura.
- Sangrado inexplicable o moretones.
- Piel u ojos amarillentos.
Es importante que los pacientes informen a su médico sobre cualquiera de los efectos del tratamiento para Helicobacter pylori que experimenten para ajustar el mismo si fuese necesario.
Nuevo tratamiento para Helicobacter pylori
En palabras del Doctor José Manuel Cucalón Arenal, desde el Centro de Salud de Villamayor de Gállego (Zaragoza), la investigación en el tratamiento de Helicobacter pylori está en constante evolución.
Una de las razones es que la pauta clásica de OCA (omeprazol, claritromicina y amoxicilina) está cada vez más en desuso debido a la resistencia a la claritromicina. Desde entonces, diferentes consensos y reuniones de expertos, como los de Toronto y Maastricht, han propuesto nuevas combinaciones para alcanzar el objetivo del 90% de erradicación.
La V Conferencia Española de consenso sobre el tratamiento de la infección por H. pylori es uno de los últimos consensos en este ámbito. Debido a la falta de antibióticos alternativos para tratar la bacteria, estas nuevas pautas incluyen terapias cuádruples. Es decir, se ha incorporado un cuarto fármaco a los tratamientos triples erradicadores: inicialmente metronidazol (MTZ) y más recientemente bismuto (BIS).
Este nuevo tratamiento para Helicobacter pylori ha logrado aumentar, con dicha adición, la eficacia de varios tratamientos empíricos de primera y segunda línea a más del 90%, a pesar de las altas tasas de resistencia a los antibióticos empleados.
Cómo se debe tomar el tratamiento para el Helicobacter pylori
El cumplimiento estricto del régimen de tratamiento es crucial para garantizar la erradicación de Helicobacter pylori. Para ello, debes seguir todas las indicaciones que te marque tu médico, tomando todos los medicamentos exactamente como se prescribieron, sin saltarte ninguna dosis. Esto implica completar el curso completo de antibióticos, incluso si los síntomas mejoran antes de finalizar el tratamiento.
Además, otro de los aspectos clave sobre cómo se toma el tratamiento para el Helicobacter pylori es acompañar los medicamentos con comida para ayudar a reducir los efectos secundarios gastrointestinales. Normalmente, los medicamentos se toman dos veces al día (cada 12 horas) y deben ser tragados enteros, sin triturar ni masticar. Es importante que no tomes más medicamentos, ni tampoco con más frecuencia. La automedicación es peligrosa y puede tener graves consecuencias.
Cuánto tiempo dura el tratamiento para la bacteria Helicobacter pylori
Un tratamiento estándar para eliminar esta bacteria suele durar entre 10 y 14 días. Tras esto, lo normal es que unas 4-8 semanas después se realice una prueba para comprobar su erradicación, como puede ser un test del aliento con urea C-14.
En algunos casos, dependiendo de la respuesta del paciente y de la resistencia bacteriana, el médico puede recomendar un periodo de tratamiento más prolongado con un ajuste en la terapia.
Tratamientos naturales para el Helicobacter pylori
Como hemos mencionado, el tratamiento principal para H. pylori se basa en un conjunto de antibióticos y medicamentos con el fin de acabar con la bacteria. No obstante, algunos pacientes optan por utilizar remedios naturales como complemento.
Hay que tener presente que los tratamientos naturales para el Helicobacter pylori no deben sustituir el tratamiento médico, sino actuar como complemento para aliviar los síntomas y mejorar la salud digestiva.
Algunos de estos tratamientos incluyen:
- Probióticos: estos suplementos ayudan a mantener un equilibrio saludable de bacterias en el intestino.
- Miel de Manuka: tiene propiedades antibacterianas que pueden ayudar a combatir el H. pylori.
- Aceite esencial de cedro: puede ser útil en apoyo a los antibióticos para eliminar la bacteria debido a sus propiedades beneficiosas para el sistema digestivo
- Té verde: el té verde, además de ser una infusión que ayuda a perder peso, contiene compuestos que pueden inhibir el crecimiento de la bacteria.
- Brócoli: este alimento es rico en sulforafano, un compuesto que puede tener efectos antibacterianos contra el H. pylori.
- Jengibre: conocido por sus múltiples beneficios, el jengibre podría ayudar a controlar la infección. Se recomienda consumir hasta 3 gramos diarios en comidas o infusiones.
- Repollo: puede reducir la virulencia de la bacteria. Se recomienda en ensaladas o jugos vegetales.
- Cúrcuma: La curcumina en la cúrcuma tiene propiedades antioxidantes que podrían ayudar a erradicar el H. pylori. Puede consumirse en comidas, infusiones o cápsulas, pero no se recomienda durante el embarazo y la lactancia.
- Ajo: cuando se consume crudo, puede tener efectos antibacterianos. Se recomienda incluir en la dieta diaria.
Recuerda que la erradicación del Helicobacter pylori sin antibióticos no es posible y lo aconsejable es consultar a un médico antes de iniciar cualquier tratamiento natural.
En definitiva, ¿Cuál es el mejor tratamiento para el Helicobacter pylori?
Con el fin de eliminar el H. pylori, el tratamiento más utilizado es el que supone una triple terapia, que combina dos antibióticos y un inhibidor de la bomba de protones (un reductor de acidez). Este tratamiento, administrado durante varios días, logra una tasa de curación del 80%.
No obstante, debido a la resistencia que algunas personas han ido desarrollando a los antibióticos, para el 20% de los pacientes que no mejoran, se utiliza la cuádruple terapia, que incluye dos antibióticos diferentes, el inhibidor de acidez y un gastroprotector como el bismuto.
Esta terapia cuádruple ha mostrado ser muy efectiva, especialmente en personas con alta resistencia a la claritromicina. Sin embargo, habría que plantearse en cada caso individual qué tratamiento hay para la bacteria según su situación específica.
En cualquiera de las opciones, respecto a cuantos días dura el tratamiento para Helicobacter pylori, este tratamiento suele abarcar entre 10 y 14 días inicialmente, con la posibilidad de ampliación si no se erradica el problema. Además, es posible llegar a combinar tratamientos médicos convencionales, con nuevas terapias emergentes y opciones naturales para ofrecer una solución integral y prevenir sus complicaciones a largo plazo.
Los estudios estiman que la eficacia de la terapia para erradicar H. pylori está en torno al 90% siempre y cuando la tasa de resistencia doble (es decir, la resistencia a claritromicina y a metronidazol a la vez) se encuentre por debajo del 15%. Por ello, si no se llega a desarrollar complicaciones, la vida del paciente no tendría por qué verse en peligro.