Nadie está exento de padecer un golpe de calor, con consecuencias fatales si no se reacciona a tiempo. Y cuando decimos nadie, nos referimos a que hasta nuestras mascotas pueden sufrirlo.
Es esencial conocer los síntomas de los golpes de calor en adultos y niños, saber qué pasos seguir si se da, pero, sobre todo, cómo evitarlo.
Índice
¿Qué es un golpe de calor?
Un golpe de calor consiste en un trastorno que es ocasionado por un exceso de calor en el cuerpo. Ocurre cuando este alcanza los 40º C o más.
Normalmente, este exceso de calor es producido por una exposición prolongada a temperaturas altas o por realizar esfuerzo físico cuando estas están presentes en el ambiente.
Es una afección muy frecuente en los meses de verano, siendo la más peligrosa y grave que se puede sufrir por calor.
Cuando se detectan los síntomas de golpe de calor en una persona, se debe actuar con rapidez, ya que requiere de un tratamiento de urgencia. Si no, las consecuencias pueden ser fatales.
Consecuencias de un golpe de calor
Quien se enfrente a un golpe de calor, podrá vivir una disminución de los niveles de conciencia.
Pero, además, un golpe de calor que no se trata a tiempo puede provocar daños en el cerebro, los riñones, el corazón y los músculos del cuerpo.
Dicho daño se hace aún más grave cuanto más se retrase la intervención, pudiendo llegar a sufrir severas complicaciones o, incluso, la muerte.
Síntomas del golpe de calor
Si no se ha podido evitar, es fundamental que se conozcan los síntomas del golpe de calor para ayudar a la persona que lo está sufriendo.
Síntomas de golpes de calor en adultos
Entre los síntomas de los golpes de calor en adultos, encontramos:
- Temperatura corporal superior a 40º C.
- Sed intensa.
- Sequedad en la boca.
- Piel seca.
- Sensación de sofoco.
- Mareos o desmayos.
- Vértigos.
- Piel enrojecida.
- Respiración acelerada.
- Agotamiento o debilidad.
- Calambres musculares.
- Dolores de cabeza, con sensación de opresión o latido.
- Dolores de estómago.
- Taquicardias.
- Falta de apetito.
- Náuseas.
- Confusión, desorientación, delirio.
- En los casos más graves, puede haber convulsiones. Incluso, la persona puede entrar en coma.
Síntomas del golpe de calor en bebés y niños
Además de lo anteriormente mencionado, hay otras señales que pueden indicar un golpe de calor en bebés o niños pequeños.
- Irritabilidad. El bebé o menor llorará inconsolablemente.
- Piel muy irritada a causa del sudor en el cuello, axilas, pecho, zona del pañal o pliegues del codo.
Causas del golpe de calor
La aparición de los síntomas del golpe de calor puede suceder como resultado de dos causas principales.
La exposición ante un ambiente caluroso
Es un tipo de insolación llamado «insolación sin realizar esfuerzo». Se da cuando la persona se expone a un ambiente muy caluroso, lo cual provoca que su temperatura corporal aumente.
Con frecuencia sucede al exponernos bajo un clima húmedo y caluroso, durante un tiempo prolongado.
Actividad extenuante
En este caso se trataría de un golpe de calor provocado por insolación por esfuerzo. Sucede cuando, tras realizar actividad física intensa durante un día caluroso, la temperatura del cuerpo se eleva peligrosamente.
Si bien es cierto que estas dos causas son las principales, hay motivos que, añadidos, son los que propician este padecimiento:
- Beber alcohol: esto puede afectar a la capacidad que tiene el organismo para regular la temperatura.
- Deshidratación: no beber la suficiente agua impedirá recuperar los líquidos que pierden con la sudoración.
- Usar mucha ropa: esto evita que el sudor se evapore con facilidad y que esto enfríe el cuerpo.
Personas de riesgo ante el golpe de calor
Sin duda, la edad es uno de los principales factores de riesgo para padecer un golpe de calor.
Esto es así porque la capacidad para hacer frente a las altas temperaturas depende de la fortaleza del sistema nervioso central.
Por ese motivo, hay varios perfiles de riesgo:
- Los niños: en su caso, el sistema nervioso central no está plenamente desarrollado.
- En los adultos mayores, a partir de los 65 años, este comienza a deteriorarse. Eso hace que el organismo cada vez sea menos capaz de enfrentarse a los cambios de temperatura corporal.
- Además de los pequeños y los adultos mayores, las personas de cualquier edad que padecen enfermedades crónicas, son también más vulnerables ante los golpes de calor. Entre esas enfermedades se encuentran las relacionadas con el corazón o los pulmones. También sucede los mismo con la obesidad.
Otros factores de riesgo
Adicional a la edad, hay otros factores de riesgo que puede provocar este padecimiento por altas temperaturas.
- Esfuerzo bajo el calor. Por ejemplo, el entrenamiento militar o la práctica deportiva.
- Falta de aire acondicionado. Los ventiladores ayudan, pero el aire acondicionado siempre será el sistema más eficaz para rebajar la temperatura y reducir la humedad del ambiente.
- Ciertos medicamentos. Hay ciertos fármacos que pueden afectar a la capacidad de nuestro organismo para mantenerse hidratado y responder correctamente ante el calor. Por ese motivo, hay que tener mucho cuidado cuando suban las temperaturas si tomas vasoconstrictores, betabloqueadores, diuréticos, antidepresivos o antipsicóticos. Y, por supuesto, nunca optes por la automedicación.
- Exposición repentina al calor. Por ejemplo, una ola de calor en el inicio del verano o viajar a un lugar donde haya temperaturas muy altas.
Golpe de calor: qué hacer
Ante un golpe de calor, hay que saber qué hacer correctamente. Por ello, toma nota de los pasos a seguir:
- Lleva a la persona a un lugar fresco, que esté a la sombra y donde corra el aire.
- Colócala en posición semisentada para favorecer su respiración.
- Procura que beba agua, pero que esta no esté muy fría. Debe beber a pequeños sorbos, nunca de golpe.
- Retírale algo de ropa. Si el sitio no tiene aire acondicionado, dale aire con un abanico o ventilador.
- Aplica paños de agua fría en la nuca, frente y cuello. Si se trata de un niño también se le pueden colocar en las axilas y en la ingle.
- Cuando haya mejorado su estado, la persona deberá acudir a un centro médico para ser sometida a una revisión. Los daños pueden estar ahí a pesar de recuperarse del golpe de calor.
- Si la persona no se recupera con los auxilios facilitados o pierde el conocimiento, se le debe tumbar con las piernas flexionadas y llamar a los servicios de emergencias.
Qué no hacer ante un golpe de calor
Todas las acciones a realizar cuando se producen los golpes de calor en adultos o niños tienen como fin bajar la temperatura corporal. Sin embargo, es importante no hacerlo de manera brusca.
El enfriamiento del cuerpo debe hacerse de manera progresiva. Pasar de repente de 40 grados a 20 va a ser muy peligroso. Ante semejante contraste, nuestro sistema circulatorio puede sufrir un shock muy grande que puede acabar en fallecimiento.
Por ello:
- No se debe hidratar a la persona que sufre el golpe de calor con agua muy fría. Fresca, sí, pero no extremadamente fría.
- Se debe refrescar a la persona, pero nunca con baños de agua fría.
- Por tanto, si el golpe de calor se da estando en una playa o piscina, no se debe introducir a esa persona en el agua de golpe.
Cómo prevenir un golpe de calor
Frente a un golpe de calor, qué hacer una vez se da es fundamental, pero es más esencial prevenirlo.
Dado que sus causas están más que claras, se puede decir que este problema se puede predecir y evitar. Para ello, puedes tomar ciertas medidas.
Usa la vestimenta adecuada
Lo mejor para los días de mucho calor es usar vestimenta holgada y liviana.
Ponerse mucha ropa o ropa muy ceñida no permite que el cuerpo se enfríe de manera adecuada.
Bebe mucho líquido
Mantener una buena hidratación ayuda a tu cuerpo a sudar y a conservar una temperatura adecuada.
Ten especial cuidado con los bebés lactantes, pues ellos se deshidrtan con mayor facilidad.
Protégete contra las quemaduras del sol
Las quemaduras solares son peligrosas por múltiples razones. En lo que respecta al tema que nos atañe, dichas quemaduras afectan a la capacidad del cuerpo para enfriarse.
Usa protector y no te olvides de la crema solar para tus niños.
Nunca dejes a nadie en el coche estando estacionado
Dejar a cualquier persona o mascota en el interior de un vehículo estacionado en verano, aunque este esté a la sombra y con las ventanas abiertas, puede ser mortal.
Esto es así porque cuando aparcas el vehículo, a la
temperatura que ya tiene se le pueden sumar unos 10-11º C más en cuestión de 10 minutos.
Tómate las cosas con calma
Es posible que tengas ciertas costumbres o rutinas que quizás debas modificar en los días en los que las temperaturas son más extremas.
Cambia tus horas para salir a hacer ejercicio, la compra, pasear al perro…
Trata de programar esas tareas y cualquiera que implique trabajo físico para momentos más frescos del día.
Toma precauciones si eres persona de riesgo
Si tomas medicamentos, tienes enfermedades crónicas o eras mayor, evita la exposición al calor y actúa con rapidez si notas síntomas de golpe de calor.
Cuidado con lo que comes y bebes
Evita las comidas pesadas cuando el calor apriete. Del mismo modo, evita las bebidas con cafeína o con mucha azúcar.
También evita beber cosas muy frías o muy calientes.
Prevenir el golpe de calor en niños
Para prevenir el golpe de calor en niños, es importante:
- Ofrecerles continuamente líquidos y no esperar a que sean ellos los que pidan agua.
- Bañarlos y mojarles el cuerpo con frecuencia.
- Vestirlos con ropas holgadas, de colores claros, livianas y de algodón. Si están en casa, mejor desvertirlos.
- Proponerles juegos tranquilos para evitar que se agiten.
- Mantenerlos en lugares ventilados o con aire acondicionado.
- Evitar su exposición al sol, especialmente en los horarios en los que el calor es más fuerte.
- No dejarlos ni permanecer con ellos dentro de un vehículo estacionado.