Si algo debe saber la mamá de su bebé recién nacido es que su sentido de la vista se irá desarrollando a lo largo de los meses, hasta conseguir la visibilidad perfecta. La visión durante sus primeras semanas no es la misma que tenemos todos en edad adulta, por lo que seguramente al mirarte solo observará una forma curva, tal vez grande y de poco movimiento. Te vamos a contar cómo ve el bebé mes a mes
Y para entender mejor cómo va evolucionando la vista de nuestros pequeños hasta lograr ver formas y colores reales, aquí te diremos cómo ve el bebé mes a mes, así que pon mucha atención para poder entender qué pasa en cada etapa de su vida y afianzar mucho más la empatía con este pequeño ser, cuyo camino por el mundo apenas empieza.
Índice
Desarrollo visual del bebé en el útero
Pero antes de conocer cuándo empiezan a ver los bebés y cómo va evolucionando su sentido de la vista, es importante saber exactamente cómo es el desarrollo de sus órganos visuales desde el útero.
Y es que los ojos empiezan a formarse a partir de la semana 4 o 6, al mismo tiempo que la columna vertebral. El perfecto desarrollo del embrión es fundamental para la salud del bebé, en este caso para lograr una óptima visión a medida que el tiempo avanza.
Para la semana 22 ya están formados en su totalidad, incluso cuentan con pestañas y párpados. En la semana 26, es normal que entreabran sus pequeños y delicados ojos. Pero los expertos coinciden en que no lo hacen para ver, sino que el movimiento es producto de sus reflejos.
La semana 30 es crucial, pues es cuando por fin logran abrir sus ojos de manera definitiva.
¿Cuándo empiezan a ver los bebés con claridad?
Ahora sí. Ha llegado el momento de descifrar el misterio y conocer cómo ven los bebés mes a mes y cuándo empiezan a ver con claridad. A diferencia de lo que muchos han imaginado por años, la visión de un recién nacido es bastante confusa. Y aunque es capaz de reconocer a mamá, al mirarla tendrá ante él una figura borrosa y poco definida. ¿No lo sabías, verdad?
Pues para estar enterada qué pasa con sus órganos visuales cada mes, aquí te decimos qué pasa con visión bebés a medida que transcurren los meses. ¡Presta atención!
Cómo ve un bebé de 1 mes
Prevalecen las sombras y las luces, pero en esta etapa de la vida no hay colores. El peque solo puede apreciar el contorno de los objetos cuando son demasiado grandes. Además, existe una sensibilidad a la luz, por lo que el más mínimo contacto hará que sus párpados se cierren de forma abrupta.
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¿Cómo ven los niños de 2 meses?
Aquí la visión empieza a jugar a su favor, aunque todavía falta mucho por evolucionar. La buena noticia es que el peque ya es capaz de enfocar a una distancia mucho más corta, como a unos 25 centímetros aproximadamente. Si colocas un juguete muy cerca y lo mueves muy despacio, de seguro lo seguirá con la mirada por algunos pocos segundos.
Vista de un bebé durante el tercer mes
El mes tres trae consigo más buenas nuevas. Es cuando adquiere mayor precisión y nitidez, a la vez que es capaz de reconocer tanto el contorno como los detalles. Esto quiere decir que tendrá una percepción más que clara de la nariz, ojos y boca de otras personas. Lo mejor es que podrá responder a la sonrisa y a la mirada de mamá.
Visión del bebé en el cuarto mes
¡Profundidad de imagen! Aquí es preciso hablar del tema y cómo beneficia la visión del bebé. Esto hace referencia precisamente a la capacidad de mirar y distinguir objetos a larga distancia. Además que desarrolla la capacidad de atrapar objetos o juguetes que pasan por su lado.
Cómo ve un niño en el sexto mes
El sexto mes es crucial y es que es justo el momento en el que comienza a reconocer las formas perfectamente bien. Pero también es cuando sus dos ojos trabajan unidos para ver las mismas figuras a la vez. En esta etapa ya distinguen los colores, aunque aún de forma no tan precisa.
Vista en el primer año
Se puede decir que ya al primer año de vida la visión del niño está completamente desarrollada. Esto quiere decir que hay vista tridimensional y la distinción total de cada uno de los colores. En esta etapa es importante que el peque juegue con objetos de diferentes tamaños, colores y texturas. ¡Atento a su comportamiento!
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Desarrollo visual del bebé en concordancia con sus necesidades
Muchos han sido los estudios científicos desarrollados para comprender la visión de un niño desde que nace hasta que cumple el primer año de vida. Los resultados han sido asombrosos, pues han determinado que la vista de los bebés va en consonancia con sus necesidades. Y para entender un poco más este punto, analiza los siguientes elementos:
Primer contacto visual con la mamá
Para muchos es algo inexplicable, pero lo cierto del caso es que el bebé recién nacido hace contacto visual con la mamá justo después del trabajo de parto. Por su puesto que al principio, le costará muchísimo por su poca capacidad de mantenerse concentrado y alerta.
No te preocupes si bizquea mucho o poco, pues es el producto del esfuerzo que hace para ver mejor las facciones de tu rostro, aunque, por su puesto, no logre distinguir nada durante los primeros meses.
La cara de mami gusta muchísimo al bebé. Lo hace moverse y emitir cualquier sonido. El cabello que enmarca el rostro es muy útil para crear lo que se conoce como visión periférica.
Prestan mayor atención a las personas
Los bebés suelen poner toda su atención a las personas, sobre todo a las más cercanas. Es como que si de intuición se tratara, ya que es de ellas de quienes aprende más cosas.
Su sentido de la vista está más equipado para lograr su objetivo; es decir, es mucho más cercana y más personal.
Durante el primer mes, su visión borrosa puede jugar a su favor, pues actúa como un mecanismo de defensa contra la ansiedad. En palabras más simples, no quedará abrumado con la proximidad de terceros, ya que la cercanía para él aún es asunto incomprensible.
Efecto imitación
Es impresionante que después de nacer, los bebés parecieran reconocer el enorme parecido que tiene su cara con la de los demás. Muchos científicos manifiestan su sorpresa porque los niños a esa edad ni siquiera han mirado las formas de su propio rostro.
Los expertos consideran que al inicio de sus vidas, experimentan lo que ellos mismos llaman “reflejarse”. Se trata de que el bebé puede reconocer su propia cara en la de las demás, lo que para muchos es una herramienta útil para que empiece a tomar conciencia de sí.
La coordinación de los ojos
A medida que la coordinación de los ojos mejora, la profundidad en la visión se hace latente. Esto es importante porque el bebé empieza a seguirte a ti y a los objetos mientras te acercas o te alejas de él.
Más adelante experimentará otra evolución que a muchos le parece genial: Y es que el peque podrá anticiparse a la trayectoria de movimiento de cualquier objeto y hasta del tuyo mismo.
¿Qué quiere decir esto? Pues que ha notado tu presencia en la habitación y que probablemente demuestre toda su emoción porque sabe (o imagina) que te acercarás para tomarlo entre tus brazos.
¿Cómo estimular la vista de un bebé recién nacido?
Si eres mamá, de seguro esto te va a interesar. La visión es el único sentido no desarrollado con el que nace el niño. Y aunque va evolucionando de forma natural con el paso del tiempo, hay algunas formas para estimular la vista a temprana edad. Estas son:
El rostro de la madre es fundamental
El cruce de miradas entre ambos es inevitable. Y ya hemos dicho que se da incluso minutos después del nacimiento. Uno o dos meses después, el rostro de mamá sigue siendo un factor verdaderamente estimulante.
Como mamá deberías ubicarte a 25 centímetros del niño. Es sin duda la distancia en la que mejor puede enfocar durante sus primeras semanas. Si al mirarlo fijamente le cantas o le hablas, con seguridad le generarás un enorme placer.
Mantén el contacto visual en todo momento
Durante los primeros meses, mamá será lo más parecido a una súper heroína. Es que el bebé asociará su voz con sus caricias, con el tacto y hasta con las ganas de saciar sed y hambre.
Conservar el contacto visual, incluso cuando le das de comer o lo bañas es imprescindible. Los nexos entre ambos mejoran sobremanera cuando lo mira o lo toca en suaves y tiernas caricias.
Contraste de colores
Ya durante el tercer mes es capaz de asociar lo que escucha con lo que mira. Agita sobre él cualquier objeto (sonajero preferiblemente) y desplázalo de un sitio a otro. Verás cómo lo sigue con la mirada.
Si no tienes un sonajero a la mano, consigue cualquier objeto de diferentes tamaños, de formas más elaboradas y colores vibrantes.
También puedes intentar con juego de luces, pero cuida el nivel de intensidad antes de exponer al niño. También tratará de seguirlas y si ves que contrae las pupilas es porque todo está en orden.
La estimulación de la vista con un espejo
Necesitarás la ayuda de un espejo real si lo que buscas es estimular la visión, aun cuando ni siquiera pueda desplazarse por cuenta propia. Colócalo al lado de su cuna y verás que le fascinará la imagen que percibe en el cristal hasta tener conocimiento de que se trata de su propio reflejo.
El uso del espejo es un estimulante perfecto para el desarrollo visual del bebé. ¿Por qué? Es sencillo, ya que gracias a él consigue mejor enfoque y capacidad para observar. Además, contribuye a una mayor percepción del espacio y a coordinar las manos con los ojos.