Estamos continuamente oyendo hablar sobre la relevancia de llevar un estilo de vida saludable. No obstante, a veces nos planteamos que este forme parte de nuestro día a día, pero no sabemos ni por dónde empezar. ¿Queréis saber cómo lograrlo? Pues aquí tenéis 10 consejos para tener un estilo de vida saludable.
Cómo llevar una vida saludable: 10 consejos
Los estilos de vida saludable son esenciales si se quiere gozar de una existencia más plena. Eso sí, para conseguirlo, es necesario considerar la salud en un modo integral. Eso incluye trabajar cuerpo y mente. Con un estilo de vida sano, tu salud física se verá favorecida, pero también tu estado de ánimo.
A la hora de establecer hábitos alimentarios y estilos de vida saludable, hay que tener en cuenta las características particulares de cada persona. Por ello, lo ideal es que antes de comenzar cualquier dieta o tabla de ejercicios intensiva, consultes a tu médico. Aun así, las pautas que exponemos a continuación son puntos generales y básicos que forman pare de cualquier rutina saludable. Veamos, pues, algunos de los consejos para una vida saludable más importantes.
1. Realiza actividad física
Uno de los principales consejos de vida saludable es, sin duda, la realización de ejercicio. Los expertos recomiendan realizar unos 150 minutos semanales de actividad física moderada. Esta es importante para todas las personas, pues entre otras cosas:
- Es buena para el corazón y la circulación.
- Ayuda a quemar calorías sobrantes.
- Es pura motivación.
- Mantiene o incrementa la masa muscular.
- Además de ayudar a la salud física, también favorece la emocional.
No es necesario ser una atleta experimentado para dedicar tiempo a la actividad física. Además, al iniciarnos, no se debe pensar solo en los gimnasios. Existen muchísimas alternativas para realizar ejercicio, e, incluso, se puede incluir fácilmente en nuestra rutina diaria.
Por ejemplo:
- Dar un paseo en los descansos de trabajo.
- Dedicar tiempo a una actividad deportiva con la familia los fines de semana.
- Usar siempre las escaleras, en lugar del ascensor.
2. Lleva una dieta variada
Los hábitos alimentarios y estilos de vida saludables van siempre de la mano. Para gozar de buena salud necesitamos obtener más de 40 nutrientes. Pues bien, ningún alimento puede proporcionarnos todos a la vez.
Por ello, hay que efectuar elecciones de alimentos de manera equilibrada y de forma continua. Es decir, no solo en una comida aislada.
Dentro de tu dieta no pueden faltar las frutas y las verduras. Estos alimentos proporcionan una gran cantidad de minerales y vitaminas, además de fibra, esencial para un óptimo funcionamiento del tránsito intestinal.
Además de todo lo mencionado, dentro de las pautas alimentarias, es importante tener en cuenta la regularidad y el tamaño de las raciones. Saltarse las comidas no es sano y tampoco lo es, por ejemplo, no desayunar para aumentar la cantidad en el almuerzo.
¡Hay que ser constantes y controlar el total de lo que consumimos!
Por cierto, si tenéis hijos, no olvidéis que su dieta también tiene que estar formada siguiendo un menú saludable infantil.
3. Reduce la ingesta de sal y de azúcar
Un alto consumo de sal puede elevar la presión arterial y el riesgo de sufrir cardiopatía coronaria. Por ello, es crucial que reduzcas su ingesta.
Algunos pasos para ellos, son:
- Evita poner sal sobre la mesa para no caer en la tentación de echarle por inercia.
- Jamás eches sal sin haber probado antes la comida.
- Intenta sustituir la sal por especias. De esta manera aumentarás la variedad de sabores y aromas.
- Cuando hagas la compra, elige productos con un contenido en sodio menor al que sueles acostumbrar.
En cuanto al azúcar, sabemos lo atractiva (y adictiva que es). Los alimentos azucarados son muy calóricos, por lo que su consumo debe ser muy moderado.
Para sustituir el azúcar, por ejemplo, en el café, usa alternativas como la stevia.
4. Evita el tabaco
El tabaco puede causar muchísimas enfermedades. Algunas de ellas, como sabemos, pueden llevar a la muerte:
- Ataques del corazón.
- Cáncer de pulmón, de boca, de esófago y de laringe, entre otros.
- Derrame cerebral.
- Bronquitis crónica.
- Enfisema.
- Faringitis y laringitis.
Por lo tanto, se podría decir que el tabaco es la causa de muerte que más fácilmente se puede prevenir. Sin duda, dentro de cualquiera de los estilos de vida saludable, no hay cabida para el tabaco.
5. Ejercita tu mente
Trabajar las habilidades mentales es otro de los importantes consejos sobre vida saludable. La salud física y mental van de la mano, y una ayuda a la otra.
No descuides tu cerebro por darle importancia al cuerpo o a otras cosas. Lee, escribe, haz crucigramas, sudokus o ejercicios de cálculo. El entrenamiento cerebral es fundamental para prevenir el deterioro cognitivo.
6. Controla tu peso
La Organización Mundial de la Salud recomienda mantener un peso equilibrado para disminuir riesgos de sufrir enfermedades como la hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares, en el caso de la obesidad.
Un peso por debajo de lo normal tampoco es saludable. Este puede tener una relación directa con la fatiga crónica, la depresión, la anemia y algunos problemas cardíacos.
Una alimentación balanceada, junto con algunos cambios en los hábitos de vida (como la actividad física), te ayudarán a mantener un peso adecuado.
7. Duerme lo suficiente
Llevar estilos de vida saludable es mucho más que comer bien y ser activos.
El sueño es crucial en la restauración del sistema nervioso central, además de darnos la posibilidad de restablecer, mediante el descanso, nuestras funciones físicas y psicológicas.
Cuando no dormimos bien, nuestra fatiga se acumulará, nos encontraremos somnolientos durante el día y no podremos dar lo máximo de nosotros, al disminuir nuestro rendimiento físico y mental.
Si muestras problemas para descansar, evita el consumo de alimentos y bebidas estimulantes. También puedes iniciarte en actividades relajantes antes de dormir, como la meditación.
8. Haz cosas que te motiven
Los estilos de vida saludable también pasan por dedicar tiempo a las actividades que nos hacen felices y que nos motivan.
El estado de ánimo positivo que nos generan dichas actividades mejoran nuestro bienestar psicológico y salud en general.
Además, ayudan a reducir el estrés, factor que puede debilitarnos no solo mentalmente, sino que también afecta a nuestro sistema inmune.
Desde escuchar música, a bailar, pasando por realizar actividades manuales, o, simplemente, quedar con los amigos para charlar o dedicar un tiempo a la semana para hacer planes en pareja. ¡No olvides que todo eso también es salud!
9. Bebe muchos líquidos
Dentro de los hábitos alimentarios y estilos de vida saludable, no podemos olvidar la relevancia de la hidratación.
Lo ideal es que los adultos bebamos unos 2 litros de líquidos al día. Esta cantidad debe ser superior si hace mucho calor o se desarrolla mucha actividad física.
Evidentemente, el agua es la mejor fuente de líquidos, pero no es la única. Las infusiones, los zumos de fruta o la leche, también son válidas, siempre y cuando no sean la principal fuente.
10. Disminuye la ingesta de grasas saturadas
Otro de los consejos de vida saludable es disminuir la ingesta de grasas saturadas. Es importante recalcar la parte de «disminuir», ya que muchas personas consideran que lo adecuado es eliminarlas.
Eso es un error. Las grasas son relevantes para que el cuerpo funcione correctamente. Lo que sucede es que un consumo excesivo de las mismas puede repercutir de forma negativa en la salud cardiovascular y en el peso.
Simplemente, hay que controlar su consumo y mantener un equilibrio entre estas y las grasas insaturadas.
Beneficios de llevar un estilo de vida saludable
Aunque los beneficios han ido siendo mencionados en cada punto anterior, he aquí un buen resumen de los mismos:
- Te mantendrás en mejor forma física.
- Puedes prevenir muchas enfermedades.
- Gozarás de mejor salud, a nivel general.
- Tu humor y estado de ánimo se verán favorecidos.
- Tendrás unos huesos y articulaciones más fuertes.
- Te sentirás más motivado para afrontar el día a día.
- Reducirás el estrés, la tensión, la ansiedad y mejorarás las relaciones interpersonales.
- Desarrollarás mejor tu cerebro.
- Aunque dormir lo suficiente forma marte de los consejos de vida saludable, una vida saludable también ayuda a regular el sueño.
- Aumentarás la expectativa de vida.
- Mejorarás el metabolismo.
- Mejorarás la autoestima.
Llevar un estilo de vida saludable no es tan complicado como algunos piensan. Quizás lo más difícil puede ser convertir estas pautas en hábitos. Por ello, es esencial marcar unos objetivos y crear constancia.
Verás como todo se vuelve mucho más sencillo cuando se empiezan a notar los resultados. No lo dudes, si te lo planteas, ¡tu cambio te está esperando!