La adolescencia es una etapa crucial en nuestras vidas. Todos los adultos pasan por ella, comprobando por sí mismos la transformación física y emocional que conlleva. Y es que, la persona que los experimenta puede suponerle una crisis de identidad, modificaciones en sus relaciones y una gran cantidad de emociones. Por lo tanto, es importante conocer y entender los cambios en la adolescencia. No solo por parte del propio adolescente, sino también por sus progenitores, pues esto les ayudará a dar el apoyo que sus hijos necesiten.
Índice
¿Qué es la adolescencia?
La adolescencia es una etapa vital que supone la conversión del niño en adulto. Esta comienza con la pubertad y finaliza con la conclusión del desarrollo bio-psicosocial en el adolescente. Es una época que va acompañada de cambios intensos, tanto a nivel físico, emocional, psicológico y social.
Habitualmente se sitúa su inicio entre los 13 y 15 años. No obstante, el comienzo y la duración de la misma tiene consideración variable según unos expertos u otros.
Por ejemplo, la Organización Mundial de la salud habla de adolescencia para el periodo entre los 10 y 19 años, considerando etapa de juventud entre los 19 y 25. Por su parte, la Asociación Americana de Salud y Medicina de la Adolescencia sitúa este periodo entre los 10 y 21 años, diferenciando 3 etapas.
Etapas de la adolescencia
Al hablar de adolescencia, se suele dividir esta en tres etapas.
La adolescencia temprana
Este periodo abarca, de forma aproximada, desde los 10-11 años hasta los 14.
Su principal característica es el inicio de la pubertad, donde se producen grandes cambios físicos relacionados con el crecimiento y la maduración sexual.
En este momento, los adolescentes empiezan a mostrar menos interés por sus padres y crece la preocupación por su cuerpo.
Durante esta etapa mejoran sus capacidades cognitivas y empiezan a aparecer objetivos vocacionales irreales e idealistas.
Adolescencia media
Etapa que va de los 15 a los 17 años.
Una de las características más destacables son los posibles conflictos familiares. Esto se debe a la importancia que toma el grupo para el adolescente y a su reclamo independiente.
Los adolescentes en esta etapa son muy sensibles a la modas y los mensajes publicitarios, pero también aumenta su capacidad creativa e intelectual.
Adolescencia tardía
Es la etapa que va desde los 18 hasta los 21.
Se caracteriza por la reaceptación de los valores y los consejos maternos y paternos, y por asumir tareas y responsabilidades asociadas a la vida adulta.
Se completa el crecimiento, así como el desarrollo puberal. Además, otro de los cambios de la adolescencia en esta etapa es que los adolescentes forjan sus propias opiniones y su personalidad.
Cambios físicos en la adolescencia
Si de cambios en la adolescencia hay que hablar, los físicos son los más evidentes.
Dichos cambios no se dan a la misma vez en todos los adolescentes. En las chicas suelen ser más perceptibles entre los 13 y los 15 años y en los chicos entre los 13 y los 14.
Veamos cuáles son los cambios físicos en la adolescencia para ellos y para ellas.
Cambios físicos en la adolescencia de los hombres
Algunas de las transformaciones que se producen en el cuerpo masculino durante esta etapa son:
- Crecimiento del vello corporal: labio superior (bigote), barba, axilar, púbico.
- Aumento de la estatura.
- Cambios en la voz, volviéndose más grave.
- Crece en el cuello la nuez de Adán (nuez) o manzana de Adán.
- Crecimiento de los testículos, así como alargamiento del pene.
- Primeras erecciones y eyaculación. También comienzan las poluciones nocturnas.
- Aparición de acné.
- Aumento de la sudoración y del olor corporal.
Cambios físicos en la adolescencia de las mujeres
En las chicas también se producen cambios físicos evidentes durante su etapa adolescente:
- Ensanchamiento de las caderas.
- Crecimiento de las mamas.
- Cambios en el útero, vagina y ovarios.
- Uno de los cambios físicos en la adolescencia de las chicas más importantes es, sin duda, el inicio de la menstruación y de la fertilidad.
- Crecimiento de vello púbico y de las axilas.
- Aumento de estatura.
- Cambio en la forma pélvica.
- Redistribución de la grasa corporal.
- Acné.
- Olor corporal más fuerte.
En general, durante la adolescencia, los chicos y chicas alcanzan el 25-50% del peso adulto ideal y el 25% de la talla adulta.
Cambios psicológicos en la adolescencia
Los cambios psicológicos en la adolescencia también son muchos y muy relevantes, tanto para ellos como para ellas.
En este caso no se puede hacer distinción por sexo, pues pueden suceder indistintamente en ambos casos.
- La actitud del adolescente puede cambiar y volverse rebelde, agresivo/a o inestable.
- Puede surgirle el deseo de aislarse.
- Los cambios en los estados de ánimo puede ser habituales y repentinos.
- Empiezan a cuestionar las órdenes de sus figuras de autoridad.
- Desean libertad e independencia para escoger al círculo de amistad o la pareja.
- Comienza a sentir atracción afectiva y erótica por otras personas.
- Aumenta en la necesidad de sentirse valorados y admirados dentro de los grupos a los que pertenecen.
- Sienten presión por tomar decisiones con las que no se muestran de acuerdo.
Tanto los cambios físicos como psicológicos en la adolescencia son normales. Especialmente, si se tiene en cuenta que los adolescentes están expuestos a grandes cambios hormonales.
Otros cambios y consecuencias de la adolescencia
Además de los mencionados, hay otros cambios y consecuencias que trae consigo esta etapa de la vida.
Crisis de identidad
El adolescente se encontrará con una incertidumbre sobre lo que ha sido hasta ahora, lo que es en el momento que está viviendo y lo que será.
Duelo de la infancia
Se trata de la pérdida de protección que se recibe cuando somos niños.
Al abandonar la infancia se pone fin a relaciones de gran dependencia, ocurriendo además en un periodo de muchas dudas e incertidumbres.
Dudas e inseguridades
Precisamente este es otro de los cambios en la adolescencia más evidentes.
Algunos adolescentes comienzan a preguntarse si su desarrollo se está produciendo con normalidad y/o requieren información que con frecuencia cuesta pedir sobre muchos asuntos.
Bajada de autoestima
Los cambios físicos pueden llegar a provocar una bajada de autoestima tanto en chicas como chicos adolescentes.
Por ejemplo, las hormonas pueden desencadenar la aparición de acné, algo que puede afectar a su amor propio.
Además, dado que los cambios no se producen en todos a la vez, ni al mismo nivel, las comparaciones pueden aparecer entre el propio círculo de amistades, afectando a la autoestima.
Cambios en el pensamiento
Otro de los cambios en la adolescencia son aquellos que se producen en el pensamiento.
Los adolescentes quieren comprobar todo lo que saben y lo que no. Por ello, reflexionan y cuestionan sobre temas profundos y existenciales, valores y justicia, buscando establecer su propia mirada.
Problemas más comunes en la adolescencia
Los cambios ocasionados en la adolescencia no son el único asunto importante a conocer en esta etapa.
Las familias que viven con chicos y chicas adolescentes deben ser conscientes de que existen ciertos problemas que suelen darse en este periodo y que pueden llegar a afectar a quien los sufre, incluso, durante el resto de su vida adulta.
Entre dichos problemas destacan:
- Problemas de rendimiento o comportamiento en el instituto, los cuales pueden provocar fracaso escolar.
- Problemas con las relaciones familiares.
- Trastornos en la alimentación.
- Consumo de sustancias.
- Depresión.
- Embarazos no deseados.
- Bullying o acoso escolar.
- Abusos sexuales.
- Accidentes de tráfico.
Consejos para padres y madres con hijos e hijas adolescentes
Los padres y madres de adolescentes deben tomarse esta etapa como lo que es: un periodo en sus hijos inevitable, crucial, pero también transitorio.
Para ello, además de tener paciencia, pueden tomar en consideración algunos consejos.
- Lo ideal es que la comunicación sea abierta y fluida con los hijos e hijas desde que estos son pequeños. De esta manera, será mucho más sencillo mantener una buena comunicación con ellos en la adolescencia.
- Hay que mostrar interés por los amigos, las clases y los logros que alcancen.
- Es apropiado incentivar un estilo de vida saludable. Eso les ayudará no solo a sobrellevar mejor sus cambios físicos, sino a evitar que caigan en el consumo de sustancias inapropiadas.
- La disciplina debe estar presente para guiarlos y protegerlos, empleando reglas claras. No obstante, no se debe usar la opresión. En definitiva: se debe ser tolerante, apoyar, pero también poner los límites adecuados.
- Hay que escuchar y valorar sus opiniones, exponiendo con respeto las propias si no son las mismas.
- Es necesario favorecer también la realización de actividades en familia para que las relaciones se mantengan sanas.
- Por otro lado, hay que fomentar el ocio: los deportes ayudarán no solo a nivel físico, sino también para incentivar los vínculos sociales. Por su parte, la lectura propiciará su pensamiento crítico. En cuanto a las nuevas tecnologías, Internet y los videojuegos, su uso debe hacerse de manera responsable y supervisada.
- Los adolescentes comienzan a asumir más responsabilidades durante esta etapa. Por ello, los padres y madres deben ayudarlos a estructurar sus horarios y actividades de tal manera que establezcan buenos hábitos organizativos. Contar con apps para organizar el día a día es una buena ayuda.
- Es esencial estimular el sentido de la responsabilidad y el respeto hacia los demás.
- Hay que mostrarles apoyo a la hora de desarrollar sus propios criterios.
- Los progenitores deben brindar toda la ayuda informativa que los adolescentes les soliciten o, aquella que, sin solicitarla, consideren de relevancia para la etapa que están viviendo.
- Se debe favorecer la autoestima y seguridad en sí mismos.
El trato hacia los adolescentes debe ser acorde a su madurez real y no a su apariencia física. De no hacerlo así, se podría tratar de manera adulta a quien aún no lo es o infantilizar a quien ya está madurando, provocándole inseguridad y miedo a crecer.
Además de lo mencionado, los padres y madres deben tener en cuenta que los cambios en el pensamiento de sus hijos adolescentes se dan acorde a la época histórica que les ha tocado vivir.
Por tanto, todo eso hará que se enfrenten a desafíos quizás diferentes a los que los progenitores tuvieron que hacer frente cuando tenían su misma edad.
La adolescencia, las etapas que ella conlleva y sus cambios nunca deben ser vistos como una enfermedad, un problema o un periodo crítico. No obstante, cuando un adolescente no ha iniciado la etapa de desarrollo al cumplir los 15 años, será conveniente buscar ayuda de un profesional de la salud.